El insomnio se define como un trastorno del sueño, la ausencia del mismo en circunstancias anormales o la dificultad para llevarlo a cabo, ya que las personas despiertan varias veces durante la noche o muy temprano en la mañana. Su origen tiene diversas razones, en ocasiones se debe a enfermedades psiquiátricas, cardiacas, reumáticas, gástricas, en otras corresponde a horarios desordenados para dormir y en algunas al consumo de café, alcohol, nicotina o ciertos medicamentos. También se atribuye a entornos de gran preocupación.
Características y tipos del insomnio
Entre las características que presentan las personas con este sufrimiento destacan la somnolencia durante el día, dificultad para recordar, concentrarse, enfocar su atención y una sensación de incapacidad para estar activas. También se sienten irritables deprimidas y angustiadas.
Asimismo, existen 2 tipos de insomnio, explicados a continuación:
- El agudo que se caracteriza por durar algunos días o pocas semanas y es ocasionado por estrés, situaciones de tensión o traumas. Se considera que una gran parte de la población mundial ha padecido alguna vez de esta perturbación.
- El insomnio de tipo crónico que se presenta por más de un mes como un síntoma de otro padecimiento o enfermedad y es conocido por una mínima cantidad de personas.
Igualmente, el insomnio puede tener graves consecuencias como una baja calidad de vida, cansancio o fatiga intensa y frecuente, accidentes de tránsito por la posibilidad de quedarse dormido mientras se conduce y hasta trastornos cognitivos. Por esto, es necesario buscar la ayuda de especialistas que puedan ayudar a tratarlo y permitirle al cuerpo el descanso que requiere para su correcto funcionamiento.
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